Sepia officinalis

Cuerpo ancho, aplanado, con una longitud entre 30 a 40 cm. aproximadamente, con aletas que recorren todo el cuerpo.

El borde del manto dorsal se proyecta entre los ojos formando un ángulo obtuso. Presenta el sifón de pequeño tamaño en posición ventral. Los brazos son retráctiles y con ventosas, y los tentáculos unas 3 veces más largos. Éstos se usan para la caza y reproducción, con la maza que está provista de una quilla natatoria (extensión externa alargada muscular, que ayuda a la hidrodinamia). El brazo hectocotílico es el 4º izquierdo de los machos y la zona modificada comprende aproximadamente la mitad proximal.
El jibión o concha, es totalmente interno, robusto y ovalado. Presenta colores variables, negro o gris parduzco, además de una zona estriada, cuyas estrías son marcadamente curvas.

Se encuentra en zonas sublitorales, en la arena o sedimentos donde se pueden enterrar. Realiza la puesta de huevos sobre corales, y si tiene tinta la inyecta sobre éstos para oscurecerlos y facilitar su ocultamiento.
Es una especie comestible, y en los mercados se encuentra con el nombre típico de sepia.

FOTO 1 creada: Marta Hernández Balaguera

FOTO 2 corresponde a un macho de Sepia officinalis, extraída de: Libro Fauna Ibérica. Mollusca Cephalopoda

FOTO 3 corresponde a una hembra de Sepia officinalis desovando, extraída de: Libro Fauna Ibérica. Mollusca Cephalopoda